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lunes, 26 de septiembre de 2016

Despojos



La panadera
Y le manchaba los dedos de harina al entregarle el paquete y le hacía estremecer con su aroma a pastel, pero jamás se daba cuenta del hambre de amor que le provocaba. Así que una mañana él, en vez de tenderle las monedas habituales,  le entregó, ruborizado y con lágrimas en los ojos, una nota de su puño y letra. Ella experimentó un arrebato de ternura al leer aquellas dos palabras inesperadas: “Soy celíaco”.
 
Ritual
Y le manchaba los dedos de harina al entregarle el paquete con los suspiros de merengue para su abuela, y él trazaba un corazón sobre el mostrador con aquel polvo blanco y le dedicaba una sonrisa. Cada sábado, desde hacía veinte años. Pero cuando el médico dictaminó que el azúcar de doña Piedad ya no soportaba más dulces, tuvieron que buscar otro escenario y, así, cada domingo, era él el que le mojaba a ella los dedos con agua bendita al recibirla en la iglesia y ella la que dibujaba, disimuladamente, un corazón húmedo sobre el altar.

El pastelero
Y le manchaba los dedos de harina al entregarle el paquete como si de una marca territorial se tratase, seguro de que ella esperaba ávida ese momento, de que metería su mano bajo el delantal como escondiendo un tesoro, de que cuando cerrase la puerta volaría hacia su cuarto, para aspirarlos y lamerlos y, quizá, introducirlos donde él deseaba que lo hiciera, y llegar así a poseerla de algún modo.  No sospechaba que, en realidad, a pesar de su sonrisa, ella corría hacia el baño para frotarse las manos con estropajo, pues detestaba  a aquel hombre tanto como amaba sus pasteles.





 Relatos presentados a la semana 3 de la X Edición de Relatos en Cadena.  (http://escueladeescritores.com/concurso-cadena-ser/ )


10 comentarios:

  1. Pues no debería llamarse despojos. Un abrazo, Eva.

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  2. Me encanta verte otra vez en plena actividad. Me quedo con los tres.
    Besos

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  3. Me gustan mucho los tres. Los finales son sublimes.
    Besicos muchos.

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    1. Con público como tú, hasta apetece retomar la pluma. Gracias Nani!

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  4. Los dos primeros tienen su miga. La frase ha quedado encajada perfectamente y cada historia es distinta. Felicidades.

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    1. Gracias Luisa. A ver si me reengancho a esto del Rec, aunque solo sea para leeros a vosotros en la carnicería :) Un beso!

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